El reciente anuncio de la construcción de un nuevo puente internacional entre México y Estados Unidos marca un avance significativo en la infraestructura fronteriza.
El denominado Puente 4/5, cuyo diseño permitirá cruces peatonales, vehiculares y comerciales, promete mejorar la conectividad entre Nuevo Laredo y Laredo, Texas, facilitando tanto el tránsito de personas como el intercambio comercial.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó los permisos presidenciales que autorizan la edificación de este importante proyecto, que será el primero de su tipo en 25 años, desde la inauguración del Puente de Comercio Mundial.
Esta decisión refleja el compromiso de ambas naciones por fortalecer sus lazos comerciales y mejorar la infraestructura que sustenta el comercio transfronterizo, que es vital para ambas economías.
Aunque la ubicación exacta del Puente 4/5 aún no ha sido confirmada, se espera que esté situado al sur del condado de Webb en Texas, mientras que en el lado mexicano, conectaría con el sur de Nuevo Laredo, en la zona cercana a Port Laredo.
Este puente será el resultado de más de una década de esfuerzos entre las autoridades de ambos países para mejorar la logística fronteriza y la fluidez del comercio internacional.
El juez del condado de Webb, Tano Tijerina, destacó en un comunicado que este proyecto es clave para mejorar la infraestructura fronteriza y responder al crecimiento del intercambio comercial entre ambos países, lo que beneficiará no solo a la región fronteriza, sino también a la economía global.
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